El empate de ayer con el Anderlecht ha reportado al club blanquiazul otra importante suma de dinero. Concretamente 500.000 euros, que se suma a todos los premios que ya tenía cosechado el equipo malaguista.
En total son ya 18,7 millones los ingresos que ha obtenido el conjunto malaguista desde el inicio del curso, allá por el mes de agosto cuando comenzó su andadura en la Fase Previa ante el Panathinaikos.
Los premios se reparten de la siguiente forma: 2,1 millones por disputar el play off para acceder a la Liga de Campeones contra el equipo griego. 8,6 millones por participar en la Fase de Grupos de la Champions League, que acaba de finalizar. Un millón por victoria, repartido en los triunfos sobre el Zenit en La Rosaleda, el Anderlecht en Bruselas y el Milan en Martiricos, lo que completa un total de tres millones. Medio millón por cada empate, siendo en San Siro, en San Petersburgo, y el de ayer contra el Anderlecht en La Rosaleda, lo que suma otro millón y medio más. Y por último, 3,5 millones por acceder a los octavos de final del torneo.
A todo ello habrá que sumar en el futuro los ingresos por derechos televisivos, que podrían elevar la cifra final de ganancias en más de 25 millones de euros. Todo un logro para el conjunto blanquiazul que se presentó en el campeonato como una «Cenicienta» y está siendo de los que más premios económicos está cosechando.
Mientras el Málaga sigue ganando el dinero sobre el verde, en los despachos de Nyon en la sede de la UEFA se siguen poniendo trabas para enviar los premios.
El conjunto blanquiazul, que sigue siendo uno de los siete equipo que siguen siendo investigados por el máximo organismo federativo del fútbol europeo, espera que su delicada situación quede resuelta en los próximos días. De hecho, en el seno de la entidad de Martiricos tienen la esperanza de que sea antes de que comience el año 2013 cuando ya tengan desbloqueados los premios europeos. Así lo confirmó ayer Mario Husillos, director deportivo del Málaga, en Canal Plus Champions al término del partido: «Esperamos una solución inminente».
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