Pellegrini elude hablar del mercado de invierno hasta solventar los pagos

 

Pellegrini solo está centrado en la competición... y en las cuestiones económicas. Tras un verano en el que hizo de funambulista y apagafuegos para mantener unida a la plantilla, también con dotes de psicólogo, el entrenador del Málaga no quiere ni hablar ni escuchar de cuestiones relativas al mercado de invierno. En su círculo más cercano, que siempre es tan hermético como el chileno, se ha asumido el mensaje que este transmite desde la lógica y que apunta a que antes de pensar en el futuro, ya sea a corto o medio plazo, es obligado resolver los distintos aspectos del pasado.
Manuel Pellegrini solo tiene su mente puesta, casi a partes iguales, en las tres competiciones (la Liga, la Liga de Campeones y la Copa del Rey) y en la resolución de los impagos a la plantilla correspondientes al anterior ejercicio. Puede parecer ilógico que ambas cuestiones sean prioritarias en un porcentaje similar y habrá quien piense que él debe tener los cinco sentidos en la preparación de los jugadores y de los encuentros, y menos en el terreno extradeportivo. Pero no es menos cierto que ambos aspectos van unidos de la mano. Por eso, él es consciente de que, independientemente de la más que demostrada profesionalidad de sus discípulos -y que destaca cada vez que dispone de una oportunidad-, las cuestiones extradeportivas pueden acabar por resquebrajar el óptimo ambiente en el grupo y el también más que demostrado altísimo nivel de compromiso de sus miembros.

Confianza en el proyecto

En esa línea se ha expresado constantemente Pellegrini durante los últimos cinco meses en las conversaciones con sus interlocutores del club, ya sea el mismísimo presidente, Abdullah Al-Thani, o si se trata del vicepresidente ejecutivo, Moayad Shatat, o el director general, Vicente Casado. Los jugadores dieron la cara desde el primer día llevados por la insistencia del chileno en la necesidad de confiar sin la más mínima duda en el proyecto y en los responsables de este, y en este sentido parece lógica la preocupación del entrenador de que algunos componentes del equipo desvíen su atención de lo que realmente importa, la competición, para atender a cantos de sirena. Desde ese punto de vista, día a día trata de predicar con el ejemplo. Él, que es el que más se juega, antepone el presente y futuro del Málaga a su prestigio personal.

Pellegrini no ha podido ser más contundente en su reflexión sobre el venidero mercado de invierno. No quiere el más mínimo comentario, porque, como él ha recalcado en privado, es más importante pensar en el pasado (es decir, solventar los pagos a la plantilla) que en el futuro (posibles movimientos entre este mes y el próximo).

Eso sí, este mensaje que ha trasladado a los responsables del club -y que a su vez debe transmitir el director deportivo, Mario Armando Husillos, persona de la máxima confianza de Pellegrini, a los distintos representantes- no impide que el entrenador del Málaga piense que no vendría mal la llegada de algún efectivo en diciembre. Pero aún no se ha planteado ni se ha valorado, precisamente porque la prioridad es el aspecto económico en estos momentos.

«Estamos peleando en tres competiciones y tenemos cinco fichas que no utilizamos», suele apuntar Pellegrini ante las personas de su confianza al recordar que cuatro de las veinticinco estipuladas están vacantes y que además no puede contar por lesión con Baptista, al que espera ver algunos minutos, si acaso, en los dos últimos partidos del año. Aunque no lo exprese abiertamente en público -alguna vez lo ha dejado caer entre líneas-, considera que parte del entorno (la afición y la prensa) no ha valorado suficientemente que el equipo ha afrontado Liga, Champions y Copa con un grupo muy reducido, de apenas veinte jugadores, más los canteranos (Recio, Juanmi, Fabrice, Jurado y Álex Portillo), y que el rendimiento ha sido muy alto.

De hecho, cansado de que determinadas preguntas en la rueda de prensa posterior al encuentro en Getafe estuvieran relacionadas con los tres meses sin ganar a domicilio en la Liga, empleó un «tenemos lo que tenemos» más que elocuente. Ese mensaje lo había trasladado alguna vez, pero sin tanta contundencia. Pellegrini es el primero que asume que la plantilla es corta y que no vendría mal alguna incorporación para el primer semestre de 2013, pero para él la prioridad es solventar los pagos a la plantilla. De momento, hablar del mercado de invierno no toca.