La clasificación europea y las expectativas que sigue despertando el proyecto obligan al Málaga a agudizar el ojo en materia de fichajes. Las listas de refuerzos que se manejan en La Rosaleda son extensas. Y en ellas figuran futbolistas de reconocido nivel internacional. Uno de ellos, según ha podido saber AS, es el centrocampista del Oporto Fernando Francisco Reges (25-7-1987, Alto Paraíso de Goiás, Brasil). De hecho, fuentes cercanas al club portugués confirmaron a este diario que emisarios malaguistas han espiado en directo al jugador en el tramo final de temporada.
Fernando es un viejo anhelo malaguista. El club ya le sondeó el pasado verano, pero la fuerte apuesta por Toulalan y las exigencias siempre por encima de la media del presidente del Oporto, Jorge Pinto da Costa, impidieron que las conversaciones fuesen más allá. El Málaga mantiene el interés, pero es consciente de que no encontrará facilidades.
Desde el club luso deslizan que sólo accederían a traspasarle por una cantidad cercana a los 20 millones de euros, cifras absolutamente prohibitivas y susceptibles de negociación. Fernando acaba contrato en 2014 y los dirigentes del Oporto ya le han comunicado su voluntad de ampliar dicho compromiso. El Oporto es un negociador durísimo. Pero el Málaga mantiene a Fernando en su punto de mira.
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